viernes, 6 de abril de 2007

Fuentealba, docente

Carlos Fuentealba


El docente Carlos Fuentealba, quien sufrió ayer graves heridas al recibir en su cabeza el impacto de una granada de gas lacrimógeno lanzada por la policía en una protesta gremial en Neuquén, y que presentaba un "daño cerebral casi irreversible", falleció en la tarde de ayer.

Por la mañana de ayer, el director médico del Hospital Provincial Castro Rendón, Sergio Homman, había dado a conocer el parte médico en el que se indicaba que el docente permanecía en coma no farmacológico.

También había admitido que el estado de salud del profesor fue empeorando con el correr de las horas. Incluso se había "hablado con la familia" hace unas horas atrás sobre la eventual donación de sus órganos.

Los médicos informaron que Fuentealba sufrió "muerte cerebral" y que el respirador al cual estaba conectado y que lo mantenía con vida fue desconectado. Sus órganos serán donados, según informaron los médicos.

Fuentealba, de 41 años, recibió en la cabeza el violento golpe del artefacto antidisturbios disparado por uno de los policía de la provincia, quien había recibido la orden del gobernador neuquino, Jorge Sobisch, de evitar un corte en la ruta donde se manifestaban.

Uno de los docente que se econtraban en la protesta, Gabriel Pillado, profesor de geografía y uno de los que sacaron a Carlos Fuentealba del auto donde recibió el disparo, hizo un dramático relato de lo que se vivió ayer en la ruta 22.

El proyectil, aseguró Pillado en declaraciones por radio Continental, "fue disparado a dos metros de distancia, explotó la granada dentro del auto, provocando la asfixia y el aplastamiento de la masa encefálica" de Fuentealba.

"Luego de romper el vidrio de la parte de atrás, con un compañero lo sacamos del asiento", relató. Ya en ese momento, "el estado del compañero era muy grave y la policía seguía tirando", agregó.

Etiquetas: , ,