Vengo a cantar por aquellos que cayeron

Ayer mientras unas 200.000 personas coreaban la afortunada frase "sin olvido moriré", hit de difusión del último trabajo de Gustavo Cerati (propagado por radios en los tiempos de la también afortunada fecha del 24 de Marzo del 2006), unas mil personas de esas que piensan que el olvido no es más que una traición, se reunieron alrededor de un pequeño escenario montado en medio de la calle, sobre el paso del ferrocarril a escuchar al músico menos glamoroso y más vital que existe.



Negrita Martina

Escuche, negrita Martina,
la copla chiquita que el rey va a dejar
y ponga motita en la almohada,
que usté está cansada de tanto esperar.

Su madre está en el arroyo
lavando la ropa de amita Leonor.
Su padre ha vuelto cansado:
no vendió un plumero, le trajo una flor.

Martina, Melchor ya lo sabe:
"Tú no comes rosas; tú precisas pan".
Rey mago de los niños pobres
no te trajo harina, tan sólo canción.

Abrace, negrita Martina,
la copla chiquita que el rey le dejó
y ponga motita en la almohada,
que usté está cansada de tanto esperar.

Daniel Viglietti